Cuando en la autoescuela nos enseñan que el hielo hace alargar mas de 10 veces la frenada respecto a las condiciones normales de una carretera, no es que nos quieran parar los pies una vez tengamos nuestro coche, obviamente el hielo junto a la niebla es uno de los peores enemigos de los pilotos.
Esta curva se encuentra en uno de los tramos del Rallye Oberland que se celebró en el año 2008 y donde mantener el control era una tarea complicada.