Ya es demasiada angustia estar luchando de tu a tu contra un piloto y llegar al control-stop y esperar unos segundos a que te digan tu tiempo para saber si has batido al rival.
Pero aún más angustioso es jugarte un rallye del IRC contra uno de los pilotos actuales más rápidos en asfalto como es Loix, en el rallye de casa y… ¡en el último tramo!
Esto es lo que le pasó a Kopecky en el pasado Barum Rallye Zlín, donde finalmente se llevó el gato al agua por 1.2 segundos. Pero lo que ocurrió en el control-stop mejor que lo veáis vosotros.