A veces, aunque la presión de correr tras ganar el título nacional de rallyes de asfalto sea más baja de lo habitual, nadie está a salvo de cualquier imprevisto, error, susto o salida de pista. Alberto Hevia sufrió un fuerte accidente en el que, gracias a las medidas de seguridad de estos vehículos, ambos tripulantes salieron bien parados y donde dejaron muy maltrecho su vehículo. Las fotos dejan a uno sin palabras.

Desde aquí mandar un saludo al binomio Hevia-Iglesias y esperemos que estén al 100% pronto para luchar el año que viene por el título otra vez.