El rutómetro marcado para esta cuarta edición del Rally Comunidad de Madrid RACE incluye una excelente selección de los recorridos sobre asfalto que se pueden encontrar en las carreteras de la zona norte madrileña.
El RACE ha ahondado en ofrecer nuevas combinaciones de sectores cronometrados, con tramos que, excepto el del Jarama Race Track, son nuevos en su desarrollo, aunque se hayan usado de otra forma en ediciones anteriores de otras pruebas hace algunos años.
Dividido en dos etapas, el Rally CAM RACE tendrá el viernes 22 de noviembre un espectacular comienzo con casi 60 km. de competición, con el toque especial de disputarse bajo la noche.
Se arrancará con un clásico, como es el tramo de Torrelaguna – La Cabrera. En sus 5,10 km. de subida, sobre buen piso, es una buena toma de contacto para comenzar a descubrir lo que supone la prueba madrileña, en la que la velocidad y la fe serán protagonistas. Mucha confianza y buenas notas se necesitarán en Robledillo‐La Puebla, tramo que se recupera para la ocasión ‐se hizo en el pasado‐, que, por su longitud puede ser el más importante. Es un sector muy completo en sus 17,40 km., con el piso bacheado y cambiante de tipo según la zona ‐degradado y parcheado en su mayoría, para terminar sobre buen suelo reasfaltado‐. Tiene varios puntos donde aparcar el público.
A las 19:55 h. del viernes los equipos pasarán por primera vez por el Jarama Race Track, donde darán las legendarias cinco vueltas con la presencia de las chicanes en la zona de recta. La magia de la noche se podrá vivir por la afición en su intensidad desde las tribunas del Circuito del Jarama RACE, en un disfrute visual de acción, luces y sonido. Sin olvidar el poder contemplar in situ las siempre activas asistencias mecánicas que estarán allí asentadas todo el fin de semana. La noche del viernes 22 acaba con la repetición de los tramos de La Cabrera y La Puebla, entrando los coches al Parque Cerrado, ubicado en el Jarama, a las 23:50 horas.
Para la segunda etapa, el sábado 23, el itinerario plantea, además del doble paso por el trazado del Jarama, otros dos tramos, a cubrir cada uno en tres ocasiones. Madarquillos es el más impresionante de todos. Sus rápidos siete kilómetros están llenos de curvas ciegas, en subida y bajada, sin visibilidad de la salida y algunas en rasante, incluyendo pasos de puentes estrechos, paellas gigantes, muros de piedra… Tiene tres cruces con otras carreteras que confluyen en el mismo que facilitan el acceso al público. Uno de ellos es el cruce con la de Madarcos, realmente impresionante. Es complicado y exige muy buenas notas así como mucha certeza en la conducción.
El Puerto de Canencia (13,69 km.) es un clásico, pero esta vez se hará al revés, es decir saliendo de la población de Canencia en dirección a Miraflores de la Sierra. Pero hay que indicar que desde el Puerto y hasta su final discurre sólo dentro del término municipal de Bustarviejo y no el de Miraflores. Otra especial de buen suelo que demanda grandes dosis de concentración, velocidad alta, óptimas notas, trazada fina y decisión en el paso por las curvas.
Y como siempre, pendientes de la meteorología, pues las humedades, los hielos… en un espacio de serranía como éste pueden sorprender y tomar protagonismo. El Comunidad de Madrid RACE vuelve a ser un rally de verdades, en el que el pilotaje deber adecuarse a ritmos altos para vencer en sus treces tramos cronometrados 151,14 km contra el crono.
Dos etapas, cinco secciones, cinco parques de asistencia…Este es el completo menú de la prueba final Campeonato de España Rallyes de Asfalto organizada por el Real Automóvil Club de España.