Duro Rallye de Monte-Carlo para el británico Gus Greensmith, pues el pronto abandono de su compañero de equipo le hacía tener que meterse entre ceja y ceja el objetivo de llegar a la meta con el coche entero.
En un fin de semana de menos a más, Gus Greensmith y Elliott Edmondson han cerrado el Rallye de Monte-Carlo superando algún que otro susto en una octava posición, muy lejos de los pilotos más rápidos de la categoría. No era el resultado que buscaban, pero al menos se llevan para casa unas sensaciones que quieren mejorar para la próxima prueba.
Estas son las declaraciones de Greensmith tras finalizar la prueba: «No hace falta decir que este no era el fin de semana que queríamos. Tenía mucha confianza después de los test y tenía muchas ganas de este rally, pero tan pronto como llegamos a la primera etapa, la confianza se redujo a cero. Se hizo mucho trabajo detrás de escena para llegar hasta aquí, y con la preparación que tuvimos, sé que deberíamos haber estado mejor. Teemu demostró en la primera etapa que no había problemas con el coche, era solo el conductor. Tengo que aprender de este fin de semana y trabajar duro para volver a donde sé que deberíamos estar».