El supercampeón de España de Rallyes estará en el Rally de Monte-Carlo al volante de su habitual Citroën C3 R5 con el que en 2019 logró varias victorias y dos importantes títulos a nivel nacional.
Sin duda es una nueva prueba de fuego para el piloto madrileño, que regresa a Monte-Carlo tras su participación en 2017 al volante de un Peugeot 208 T16 R5, aunque no con demasiada fortuna abandonando por problemas mecánicos.
Su vinculación a Citroën España que le llevó a proclamarse junto a Borja Rozada campeón del CERA y del SCER le ha brindado la ocasión de recibir apoyo oficial de Citroën Racing, algo que la marca del doble chevrón también hará con Ostberg y Rossel (oficiales bajo las unidades de PH Sport) además de Ciamin y Camilli, que se aprovecharán también del apoyo del equipo liderado por Pierre Budar aunque tanto los dos franceses como Pepe López participen de manera privada en el WRC 3.