El polaco se sentía muy decepcionado tras su abandono ya que tras la actuación en el primer día del rallye y su inminente participación sobre una nueva superficie, la tierra, finalizar primero en este rallye sería un gran golpe de moral para Robert Kubica.
Así explicaba su accidente:
«Ha sido una pena, pero por desgracia estábamos bajando a gran velocidad y la curva era bastante rápida, pero fácil de perder el control. No era necesario, pero realicé una frenada muy fuerte reduciendo a tercera. Desafortunadamente cuando pisé el freno perdí la parte trasera del coche y tuve que contravolantear, haciendo un trompo y siendo muy estrecha la carretera y eso fue suficiente para tocar el quitamiedo con la rueda trasera izquierda y luego con la parte delantera del coche»