El cuatro veces campeón del World Rally Championship, Sébastien Ogier, tuvo la oportunidad de rodar con el F1 del equipo Red Bull en el Red Bull Ring, situado en la villa austriaca de Spielberg.
El francés fue alumno por un día y su maestro fue nada más y nada menos que David Coulthard, un gran experto en la F1. El escocés le enseñó todos los secretos que esconden los F1. Coulthard reconoció: «Teniendo en cuenta que se ha subido por primera vez a un coche de Grand Prix, ha hecho 100 kilómetros por un circuito que no conoce especialmente, creo que ha hecho un trabajo excepcional.»
Las primeras reacciones de Ogier tras subirse al F1 no han tardado en llegar: «Creo que tengo más posibilidades de tener un buen rendimiento en los rallyes que en la Fórmula 1. Para ser honesto, creo que los rallyes son mejores, me encantan los rallyes, es fantástico poder pilotar en todas las diferentes superficies». Además, añadió: «Estoy muy, muy agradecido a Red Bull por darme la oportunidad de pilotar un Fórmula 1. Fue impresionante, pero tengo los pies en el suelo. Sé que no cambiaré, solo fue pura diversión.»