La marca checa Skoda abandonará el motor de 2 litros atmosférico y seguirá en la senda del motor 1.6 turbo, habiendo testeado ya este propulsor.
Tras la demostración del potencial que tiene el Citroën DS3 RRC que usa Kubica en el ERC el fabricante checo apuntará también hacia ese camino.
En la zona de Milovice, no muy lejos de la sede de Skoda, se testeó el nuevo motor con la carroceria existente del S2000 aunque con ligeros cambios en el capó. Skoda no ha decidido aún si hará un RRC antes de acabar la construcción del Fabia R5 que se estrenará con la nueva generación de coches en 2015.